Son muchas las opciones que tienes y, seguro que, en más de una ocasión, te has quedado pensando cuál es el mejor para ti. ¿Te ayudamos?
Todo son ventajas, ¡apunta!
La primera, y más importante, es que te ayudan a reducir la placa bacteriana. Además, el riesgo de dañar el diente es menor ya que tienen controlada la presión.
Te cansas menos
Sí, sí. Te parecerá una tontería, pero hay estudios que demuestran que las personas que usan cepillos eléctricos están entre un 20 y un 40% más de tiempo cepillándose los dientes. Somos un poco cómodos en la higiene dental. Todo lo que nos facilite la vida, ¡nos encanta!
Controlan tu tiempo
Hay cepillos de última generación que tienen controlador de tiempo. Dos minutos, ese es el tiempo necesario para que tu boca esté perfecta. ¡Espera al pitido!
El manual es necesario en algunas ocasiones…
Tras una cirugía con puntos o con brackets. En estos casos es mejor utilizar un cepillo manual para hacerlo de forma más suave. ¡Ah! Y para los niños también te lo recomendamos solo por un hecho, ¡crear hábito! Además, seguro que los manuales son mucho más divertidos que los eléctricos.
Así que ya sabes, ¡tú eliges! Desde CDS apostamos por el eléctrico, su cabezal te ayudará a tener una limpieza más completa. Eso sí, elijas el que elijas, pero, SIEMPRE, dos veces al día, y durante ¡dos minutos!
